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¿Un impulso?

Anoche me llamó TS. Ayer fue el único día desde que llegué que no le llamé y lo hizo él, a las 2.30 de la madrugada. Estuve fría con él. Me llamó para preguntarme la dirección de mi casa porque se iba a quedar en ella una compañera. Se la di. Luego me contó que habían salido todos los de la oficina, incluido el director, que había una juerga estupenda por las fiestas de la ciudad y que se me echaba de menos por allí. "Se te echa de menos por aquí, se comenta", dijo con su particular forma de hablar.

Me hizo mucha gracia el acento vasco que se le pone borracho. No me había dado cuenta hasta anoche. Supongo que porque es la primera vez que le escucho hablar borracho sin estarlo yo. Me preguntó si estaba durmiendo sola o acompañada. "Acompañada", mentí. ¿Por qué mentí? No lo sé. Me salió solo. Supongo que por fastidiar. No sé. Luego me dijo que lo sentía. Supuse que por llamar a esas horas y contesté: "no pasa nada". Entonces especificó: "no, que lo siento por todo, Judi, lo siento mucho". Entonces tragué saliva para reprimir un "te quiero" y contesté un "ya hablaremos" entre susurros. "Vale, hablaremos", contestó él con un tono que sonó a tristeza, aunque no podría asegurar que lo fuera. Luego colgó.

Me costó dormirme después de eso. ¿Lo siente realmente? ¿Me llamó realmente para pedirme la dirección para Nora? Es raro porque se la había dado yo por la tarde. Además, ¿por qué no llamó ella? ¿No será que era él quien iba a quedarse en mi piso? ¿Acompañado quizás? No. No creo que se atreva. No creo que tenga tan pocos escrúpulos como para hacer eso después de pedirme perdón por teléfono. Claro que yo le dije que estaba durmiendo acompañada y...

Fanny me dijo que había estado varias horas con todos ellos, pero que no vio a TS. Me dijo que en un momento dado estaba hablando con Charly y éste le dijo, "mira, TS, un momento que voy a buscarle". Y que fue detrás de él que pasaba solo por la zona. Y luego ya no lo volvió a ver. Le pregunté si había visto a la rubita de ojos azules y me dijo que no, pero que con alguien tenía que estar ya que con la gente de la oficina no estaba. Yo le dije que sí estaba, que él me había dicho que estaba con ellos. Pero ella dice que no, que estuvo un par de horas con ellos y que a él no lo vio, así que, según Fanny, debía estar con ella.

A veces creo que a Fanny le gusta fastidiarme. A menudo lo creo de hecho. Y me molesta. Ella dice que sólo me dice las cosas para que no me engañe, para que abra los ojos, que eso es lo que hacen las amigas. Yo no comparto su forma de verlo. ¿Cuántas veces he minimizado yo realidades ante ella para no hacerla sufrir? Sí, es cierto que lo mejor es decir la verdad a los amigos para que no se engañen, pero hay formas y formas de decir las cosas. "Pues allí no estaba y no creo que estuviera toda la noche solo, con alguien estaría, tú me dirás con quién". No creo que yo le dijera nunca algo así de crudamente.

Yo, en su caso, habría dicho: "pues no sé, yo no lo vi, pero bueno, estaría por ahí dando una vuelta, mujer. No creo que sea tan cruel como para llamarte estando con la otra, aunque, bueno, nunca se sabe, pero no pienses en eso". Eso es querer a una amiga bajo mi punto de vista. Ella ya sabría que existe la posibilidad de que estuviera con otra, pero sin negárselo se puede tratar de minimizar y buscar otras posibilidades. Lo peor es que sé que si yo fuera con Fanny la mitad de dura que ella conmigo, se cabrearía muchísimo y me acusaría de hacerle daño. Qué tonta soy, de verdad. Yo me callo. Siempre me callo y aguanto cosas que no tengo por qué aguantar.

Pero bueno, me da igual. Me quedo con que me llamó, con que lo hizo solo y en un impulso. No necesitaba llamarme para saber mi dirección. Allí estaban varios compañeros que saben perfectamente donde vivo. Me llamó porque le apeteció, estoy casi segura, porque me echaba de menos. Y no sé si estaba con ella o no. Pero me da igual, porque si aún estando con ella me llamó es porque me extrañaba bastante. Y no me creo que sea tan retorcido como para, después de todo lo ocurrido, llamarme a las dos de la madrugada para preguntarme mi dirección con intención de llevarse algo a mi piso. Me parecería excesivo. Y no, no le voy a perdonar tan fácilmente todo lo ocurrido. Pero me gustó que me dijera que lo siente y me gustó que lo hiciera borracho, porque el borracho nunca miente y actúa por impulsos... Y él, en su pragmatismo exacerbado, pocas veces actúa por impulsos.

Nada, voy a ver si busco algún quehacer, que me aburro como una ostra en esta ciudad infernal... ¡Quiero volver a mi casaaaa! Dios, qué agobio.

Hasta más leer.

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